martes, 3 de marzo de 2020

Artículo: El estetoscopio

Este instrumento que ahora nos parece tan natural, tiene su historia. Y no deja de ser gracioso el modo en que se inventó, por eso quería compartirlo con vosotras. 

Sabemos la dificultad que tenían antes los médicos para reconocer a sus pacientes femeninas. Todo eso del recato, de que no estaba bien visto que un hombre se acercara demasiado a las damas, sobre todo cuando el esposo estaba delante y les ponía en un compromiso. Pero el médico necesitaba auscultar a su paciente, escuchar si el corazón latía acompasado o no, si se oía algún ruido extraño al respirar… 

René Théophile nació en Bretaña, allá por el año 1781, y fue un médico francés que, como sus colegas, sentía bastante recato a la hora de acercar su oído al pecho de las señoras. Para guardar las formas, solían poner un pañuelo sobre el que apoyaban el oído, pero ese método no era del todo fiable y tenía sus dificultades cuando se trataba de un paciente grueso; la capa de grasa no permitía escuchar debidamente. 

Se cuenta que René fue llamado a casa de Alejandro Gaudissant, cuya esposa se encontraba enferma del corazón. Allí acudió nuestro médico para intentar averiguar qué dolencia tenía la dama, pero en el cuarto no solo se encontraba el marido de la enferma, sino la madre de la dama, que no le quitaba ojo. Ya nos podemos imaginar el mal trago del pobre hombre, queriendo percibir los latidos del corazón sin conseguirlo por culpa del recato de todos. Fue entonces cuando se acordó de algo curioso que había visto: unos niños, jugando, rascaron una rama y se la aproximaban al oído para escuchar los sonidos amplificados. Así que no se lo pensó dos veces, sacó su libreta de anotaciones, la enrolló y aplicó aquel tubo de papel al pecho de la enferma. Consiguió entonces su propósito de escuchar el corazón con claridad y pudo dar su diagnóstico. Mandó entonces fabricar un instrumento hecho de madera que tenía un cono en cada parte; una se aplicaba al pecho del paciente y la otra a su oído. 

Tras su descubrimiento, escribió un libro titulado (cito textualmente) “De la auscultación mediada y tratado sobre diagnóstico de enfermedades de los pulmones y el corazón basado principalmente a partir de este nuevo método de exploración”. Desde luego el título era largo y complicado de recordar, pero sirvió para que otros muchos médicos salvaran la vida de pacientes, ya que proporcionaba descripciones exactas para poder detectar enfermedades bronquitis, efisemas pulmonares, infartos o tuberculosis. 

El mismo año en que murió, 1826, salió a la venta una segunda edición de este volumen, pero ya con un título más simple: “Tratado de auscultación mediata”. 

El mérito de la invención del estetoscopio, hay que dárselo a René, sin lugar a dudas, pero también tenemos que dar las gracias a esos chiquillos que, jugando, le pasaron la idea.

4 comentarios:

Yolanda dijo...

Me encantan este tipo de artículos, son muy interesantes y siempre aprendes algo nuevo. Gracias por documentarnos!!

Unknown dijo...

Gracias a ti por entrar a comentar, guapísima!!
Eres un sol.
Mil besos.
Nieves

Pepijica1955@hotmail.com dijo...

Muy interesante,no lo sabía cómo había sido descubierto muchas gracias por la información,me a encantado

Unknown dijo...

Muchas gracias por leerlo, me alegra que te haya entretenido.
Besos a montones.
Nieves